Vendedora china de langostino podría ser el ‘paciente cero’

31 de marzo de 2020

Una mujer vendedora de langostino de 57 años de la ciudad china de Wuhan, el punto de origen de la pandemia del coronavirus, ha sido identificada como una de las primeras víctimas del coronavirus, que hasta ahora ha cobrado casi 28000 vidas en todo el mundo, de acuerdo con informes de los medios. El “paciente cero” del coronavirus, que se recuperó por completo en enero después de un tratamiento de un mes, cree que el gobierno chino podría haber verifiado la propagación de la enfermedad si hubiera actuado antes.

Wei Guixian, identificada por The Wall Street Journal, vendía langostinos en el mercado de mariscos de Huanan el 10 de diciembre cuando desarrolló un resfriado.

Creyendo que tenía la gripe común, Wei fue a una clínica local para recibir tratamiento donde le aplicaron una inyección, informó el diario británico The Mirror.

Sin embargo, Wei continuó sintiéndose débil y visitó el Undécimo Hospital de Wuhan un día después.

El sentimiento de letargo persistió y Wei concurrió a una de las mayores instalaciones médicas de la región, el Hospital Wuhan Union, el 16 de diciembre.

En el Hospital Union, a Wei le dijeron que su enfermedad era “despiadada” y que muchos del Mercado Huanan habían llegado al hospital con síntomas similares.

A fines de diciembre, Wei fue puesta en cuarentena cuando los médicos relacionaron la aparición del coronavirus con el mercado de pescado, informó The Mirror citando al medio de noticias chino The Paper.

El artículo publicado en The Paper concluyó que es probable que el nuevo coronavirus se convierta en el quinto coronavirus endémico en humanos. “Los coronavirus claramente tienen la capacidad de cruzar los límites de las especies y adaptarse a nuevos huéspedes, lo que nos permite de manera más directa predecir más coronavirus en el futuro.”

Por lo tanto, los humanos necesitan más investigación para ayudar a formular políticas de salud pública para hacer frente a la aparición de virus similares.

‘The Paper’ citó los hallazgos de un estudio realizado por el profesor Edward Holmes, de la Facultad de Ciencias de la Vida y del Medio Ambiente, Facultad de Ciencias Médicas, Universidad de Sydney,  y del Centro Clínico de Salud Pública de Shanghai, profesor Zhang Yongzhen, Facultad de Ciencias de la Vida, Universidad de Fudan, publicado en la revista ‘Cell‘.

El llamado “mercado vivo” ha sido cerrado por tiempo indefinido después del brote de coronavirus.

Wei recuperó su salud en enero. La ‘paciente cero’ de COVID-19 cree que contrajo la enfermedad de un inodoro que compartió con vendedores de carne en el mercado. Dijo que varios vendedores que comerciaban cerca de ella también contrajeron la enfermedad mortal.