La Unión Europea (UE) ha establecido nuevas medidas para los descartes en lo que se refiere a las capturas de chirlas y almejas en el Mediterráneo occidental y a la pesca de rodaballo en el mar Negro.
Según la normativa publicada este miércoles en el Diario Oficial de la UE, la Comisión Europea considera que determinadas pesquerías demersales del Mediterráneo occidental quedan exentas por más tiempo de la obligación de desembarcar en puerto.
La medida está justificada por la alta capacidad de supervivencia de estas especies, tras haber revisado las evaluaciones técnicas.
En concreto, se establecen nuevas exenciones para las chirlas capturadas con rastras mecanizadas hasta el 31 de diciembre de 2024 y para las conchas de peregrino y las almejas capturadas de igual modo hasta el 31 de diciembre de 2023.
Los Estados con un interés directo en la gestión de la pesca en el mar Mediterráneo deben presentar a la Comisión datos adicionales sobre los descartes y cualquier otra prueba científica pertinente que justifique las exenciones antes del 1 de mayo de 2022 y 2023, según los casos.
En cuanto al rodaballo capturado con redes de enmalle de fondo en el mar Negro, se establece un plan de descartes que incluye la prórroga de la exención a la obligación de desembarcarlo hasta el 31 de diciembre de 2024, debido a que las pruebas científicas demuestran altas tasas de supervivencia.