El coronavirus ha agravado los problemas de la flota para contratar marineros y en las dos últimas semanas ha sido tarea “imposible” en zonas del litoral como el Mediterráneo, según la Federación Nacional de Cofradías Pesqueras (FNCP).
El presidente de la FNCP, Basilio Otero, ha declarado este martes a Efeagro que desde el lunes 16 (primer día laborable del estado de alarma) muchos barcos del Mediterráneo han tenido que amarrar por no encontrar personal.
La consideración de que en los barcos no se cumplían las condiciones de seguridad, así como “la falta de equipos de protección individual” (EPI) hacen “imposible” esos contratos, según Otero, quien ha pedido el suministro de ese material por tratarse de un sector alimentario “estratégico”.
En el Cantábrico, hasta el viernes pasado no se detectó esa dificultad, pero en cuanto han bajado los precios la alarma se ha expandido más, ha añadido.
El secretario general de la patronal de armadores Cepesca, Javier Garat, ha declarado a Efeagro que de momento no le consta este problema de personal.
Por el contrario, ha señalado que para los tripulantes de los buques de altura está habiendo dificultades de circulación, tanto para los que se han desplazado a aguas de África como en el Gran Sol.
El responsable de Cepesca se ha referido a que existen buques en caladeros de países terceros a los que no se les deja entrar a puerto.
La semana pasada, Mauritania prohibió a los buques que operan en sus aguas y procedan de zonas infectadas por el coronavirus el contacto con navíos o puertos del país magrebí.
Asimismo, cofradías y armadores insisten en que con las restricciones al transporte en prevención por el coronavirus es muy difícil el traslado de marineros a su lugar de trabajo: “Si un barco contrata 15 personas y pueden ir tres por furgoneta, esta necesita cinco viajes”.
Garat ha manifestado que “en el caso de la flota de bajura española lo más responsable es que amarre”.
El sector ha pedido al Gobierno que aclare si -“como otros autónomos”- pueden acogerse a ERTE por fuerza mayor los barcos que no pueden asegurar el cumplimiento de las normas de prevención contra el coronavirus.
Garat ha añadido que se está propiciando una situación de “pescadores de primera o de segunda”, pues en Cataluña y la Comunidad Valenciana los Gobiernos autonómicos ya les han dicho que ellos sí podrían optar por ese tipo de ERTE.