La flota atunera española cree que ICCAT debe cambiar su modelo de gestión para el atún tropical

18 de noviembre de 2019

La flota atunera española agrupada en OPAGAC cree que la 26 reunión ordinaria de ICCAT[1], que se celebrará en Palma de Mallorca entre los días 18 y 25 de noviembre, se enfrenta este año al gran reto de decidir una fórmula de gestión eficaz de las pesquerías de atún tropical y, en especial, dela del denominado patudo (Thunnus obesus). Según Julio Morón, director gerente de OPAGAC, “ICCAT debe coger las riendas y proponer un sistema de gestión eficaz, que no dependa de controles de captura, considerados deficientes pormuchos de sus miembros”.

Según OPAGAC, el hecho de que el patudo, junto al rabil (Thunnus albacares) y el listado (Katsuwonuspelamis), sean capturados por un gran número de países y comercializados en un mercado internacional muy heterogéneo, dificulta su gestión. Esta realidad ha aumentado, a juicio de OPAGAC, los problemas de muchas partes de ICCAT para controlar las capturas de sus flotas, con el consiguiente deterioro de la calidad de las estadísticas. En concreto, la flota señala, entre los signos de este deterioro, la falta de control de las capturas por parte de algunos miembros sujetos a cuotas, un posible aumento de los descartes, raramente declarados, en el caso de las flotas de palangre asiático sujetas a cuotas, y, por último, un aumento sustancial de las capturas de algunos países no sujetos a regulación, con la finalidad de reclamar futuros derechos.

A este respecto, cabe recordar que ICCAT, de la que forman parte 52 países, lleva estableciendo un límite de capturas para el patudo desde hace más de cinco años, pero la medida no ha impedido que las capturas aumenten muy por encima de los niveles adoptados, a causa de su ineficacia y la complejidad del sistema de control.

La próxima reunión de ICCAT plantea mantener el actual sistema de gestión, pero hacerlo más inclusivo. Para OPAGAC esta es una postura lógica que, no obstante, puede tener unas consecuencias nefastas para las flotas europeas en cuanto a reducción de cuota. Así, y en el caso de España, la cuota de patudo podría reducirse a la mitad de lo que representaba originalmente, en sólo cuatro años.

Para Julio Morón, “si la pesquería se reparte entre más flotas, todas tocan a menos, pero creemos que no es justo que una flota como la española, con un sistema rígido de control y demostrado cumplimiento, tenga que afrontar una reducción que puede llegar al 30%para satisfacer las necesidades de otros miembros que han sobrepasado sus cuotas o pescado indiscriminadamente en años de vigencia de los TAC”.

A este respecto, OPAGAC señala que ICCAT ha identificado deficiencias en la gestión de las pesquerías de varios de sus miembros, en particular en lo que respecta al control de capturas, así como casos de repetido incumplimiento de las medidas de gestión, en particular de las cuotas. En contra de lo esperado, señala la flota española, esto no ha impedido la realización de concesiones a estos miembros en términos de asignación de cuotas o privilegios especiales, como, por ejemplo, transferencias de capacidad. Además, OPAGAC califica de inaudito que, a fecha de hoy, ICCAT no conozca el número de buques que pescan en sus aguas debido a que algunos de sus miembros no facilitan esta información.

A partir de esta situación, OPAGAC lleva tiempo promoviendo la gestión basada en el esfuerzo pesquero como la opción más eficaz para cumplir con los objetivos de una gestión integral de los cuatro stocks de túnidos tropicales. Para la flota, no hay duda de que “es más fácil contar barcos que peces” fundamentalmente porque, hoy en día, el uso de nuevas tecnologías, como el control a través de satélites, permite controlar si un buque está operando o no; una fórmula mucho más eficaz que la de “esperar que las estadísticas de capturas de algunas flotas cuadren con los límites establecidos”.

Para OPAGAC, sólo mediante este enfoque y el control de la capacidad de flota, será posible asegurar la recuperación del patudo y mantener el buen estado del resto de las especies (rabil y listado) que captura la flota. No obstante, según Morón, “esta iniciativa no parece tener mucha tracción en ICCAT debido a que algunos de sus miembros prefieren mantener el sistema de TAC y cuotas, no aprendiendo ni de los errores del pasado ni de la experiencia de otros organismos, como la Comisión Interamericana del Atún Tropical, que lleva años utilizando este sistema de modo eficaz”.

Por último, OPAGAC confía en que “ante esta falta de sensibilidad política”, sí existan miembros de ICCAT que busquen revivir los éxitos ya cosechados por esta ORP, tales como el del atún rojo, el pez espada o el bonito del norte, y propongan un cambio radical en el sistema de gestión hacia controles del esfuerzo pesquero, y poder plantear así un programa plurianual de recuperación del patudo que, además, ayudaría a mantener el buen estado de las poblaciones de rabil y listado del Atlántico.

 

Balfegó pide más controles

 

Balfegó, empresa especializada en pesca, acuicultura y comercio de atún rojo (Thunnus Thynnus), acudirá a la 26 reunión ordinaria de la Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico (ICCAT) –que se celebra en Palma de Mallorca entre el 18 y el 25 de este mes de noviembre–, con la propuesta de intensificar los controles en la cadena comercial del atún rojo, tras la primera campaña de pesca realizada bajo un plan de gestión.

Sobre este particular, Balfegó solicitará la implantación obligatoria del certificado electrónico eBCD[2] de ICCAT en todos los países miembros de la Unión Europea para el comercio de piezas enteras de esta especie. Según la empresa, este certificado, que documenta cada ejemplar de atún rojo capturado y comercializado, y que incluye información sobre punto de partida, destino y receptor de cada pieza, permitiría comprobar su legalidad en cualquier punto del recorrido.

Hace ahora un año, Balfegó celebraba el final del plan de recuperación acordado por ICCAT para esta especie, que supuso diez años de esfuerzos y sacrificios para el sector, y la adopción de un nuevo plan de ordenación o gestión, medida que confirmaba la recuperación del atún rojo del Atlántico Este y el Mediterráneo (Thunnus thynnus) hasta alcanzar niveles de biomasa históricos.

A este respecto, Balfegó puntualiza que en la campaña de pesca de 2019 completó la captura de la cuota asignada (2.200 toneladas), en tan sólo siete días, lo que,a juicio de la empresa, sigue evidenciando la abundancia de ejemplares. Por otro lado, y debido precisamente a este gran número de túnidos en el mar, Balfegó valora solicitar a ICCAT un adelanto del inicio de la campaña para tratar de evitar concentraciones tan grandes de ejemplares en los cardúmenes encontrados que, según apuntan desde la empresa, han llegado a ser, en algunos casos, superiores a 400 toneladas.

En este sentido, Balfegó cree que la estrategia desarrollada con el atún rojo puede servir de modelo de gestión, participación y legalidad para otras pesquerías. Asimismo, confía en que, a partir de ahora, se respeten y se vele por el cumplimiento de las normas establecidas y garantice una gestión responsable y sostenible de la especie. Un año más, la empresa llevará propuestas para intensificar los controles y mecanismos contra la pesca y el comercio ilegal del atún rojo.

Cabe recordar que el atún rojo del Atlántico Este y el Mediterráneo (Thunnus thynnus) es el único de aleta azul pescado y gestionado de manera sostenible, desde una perspectiva de innovación y trazabilidad, en todo el mundo. Balfegó considera que el esfuerzo realizado por las flotas comprometidas debe servir de modelo a todas las pesquerías de las especies de túnidos que están sobreexplotadas.

Balfegó recuerda que todo el atún rojo que sale de su factoría lleva incorporado, desde hace años, un innovador sistema de gestión digital de trazabilidad cuyo objetivo es ofrecer la máxima transparencia al consumidor y luchar contra el fraude y el comercio ilegal de esta especie en la cadena comercial.

[1] Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico

 [2]Electronic Bluefin Tuna Catch Document