El sector gallego que opera en Malvinas no sabe si unas 21.000 toneladas de calamar capturadas en ese caladero, que llegarán a Galicia después del 12 de abril, tendrán que pagar aranceles que representarían un total de 4 millones de euros.
La flota gallega está preocupada por lo que sucederá si el Reino Unido se retira de la Unión Europea sin llegar a un acuerdo. La incertidumbre se debe a que el plazo para que el Parlamento británico apruebe el acuerdo por el Brexit vence el 12 de abril, por lo que esta semana será decisiva para alcanzar un acuerdo.
Según El Faro de Vigo, para los barcos gallegos que se encuentran en plena campaña de calamar (Loligo) las fechas son clave: a partir del día 13 está prevista la llegada escalonada de tres reefers que transportan en total 21.000 toneladas de calamar congelado.
Un Brexit duro daría como resultado la imposición de aranceles, que en el caso del pescado congelado se estima de hasta un 8 % para los productos no elaborados. Si se aplicase esta medida, la flota malvinense tendría que abonar más de 4 millones de euros en aranceles por este cargamento ya en ruta.
En plena campaña de calamar, está previsto que el primero de estos buques mercantes, con una carga de 6.000 toneladas, llegue el próximo sábado, un día después de la fecha límite. Un segundo reefer, con una carga igual, llegaría una semana después, y un tercero, transportará 9.000 toneladas.
Los barcos están en camino, y lo que no se sabe es si, al llegar después del 12 de abril, van a tener que pagar arancel por la carga.
“Mientras Londres duda y el Gobierno malvino sigue con su intención de alcanzar un acuerdo pesquero propio para mantener el nivel de actividad en sus islas, la flota vive en incertidumbre los últimos 20 días del primer período de la campaña”.
La flota comenzó la temporada de pesca de Loligo el 24 de enero y todavía queda mucho por pescar. En 2018, el primer periodo de la temporada cerró con una captura de 43.085 toneladas, y el segundo, con 35.827 toneladas.