El sector muestra su frustración por los acuerdos para el Mediterráneo

13 de enero de 2021

El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha defendido este martes el acuerdo de la Unión Europea (UE) que rebaja los días de actividad pesquera en el Mediterráneo, en una reunión con representantes de la flota.

Planas se ha reunido por videoconferencia con representantes de los pescadores del Mediterráneo, para analizar el futuro del sector y la aplicación de las decisiones del último Consejo de Pesca de la UE, del pasado mes de diciembre.

El titular de Agricultura ha asegurado que el acuerdo, que afecta a los arrastreros, es “equilibrado” y ha defendido la necesidad de medidas adicionales para “asegurar la sostenibilidad” del Mediterráneo, según un comunicado del Ministerio.

Por su parte, armadores y cofradías han manifestado su “frustración” por los resultados del Consejo de la UE, porque “ponen en peligro” la supervivencia social y económica de esta flota, según un comunicado suscrito por las organizaciones pesqueras nacionales y de las autonomías del Mediterráneo.

A la reunión han asistido: la patronal Cepesca, la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores; federaciones de cofradías de Andalucía, Murcia, la Comunidad Valenciana y Cataluña; la Federación Andaluza de Asociaciones Pesqueras (FAAPE) y el Consejo Asesor del Mediterráneo (MEDAC).

La UE reduce un 7,5 % los días en el mar para estos barcos, pero según los cálculos de las organizaciones pesqueras difundidos este martes, la rebaja “real” para la flota española del 8,3 %

Planas ha señalado que el estado de los caladeros exige “la puesta en marcha de medidas urgentes proporcionadas, bien diseñadas y equilibradas” para que sean eficaces.

Ha pedido al sector “un esfuerzo para asegurar la sostenibilidad pesquera”, ha añadido que el recorte inicial previsto por Bruselas para 2021 era del 15 % y ha defendido su labor en la negociación.

El ministro ha indicado que para 2021 en la asignación de días de pesca se dará “la mejor respuesta al patrón real de actividad de los buques”.

Según estas organizaciones, Planas y el sector han fijado un calendario de reuniones para “minimizar el impacto de los acuerdos”.

Han criticado el contenido del acuerdo: las reducciones de días de pesca, nuevas zonas de veda y el compromiso de España y de Francia de aplicar medidas técnicas selectivas a las artes de pesca, en junio.

La flota considera que no tiene “suficientes avales científicos”.

Según el sector, la flota redujo sus días en el mar un 21 % en el primer año de aplicación del reglamento del Mediterráneo (el pasado).

Han dicho a Planas “que disponían del compromiso del Gobierno para una aplicación no traumática para los pescadores”, de tal forma que les permitiera alcanzar el rendimiento máximo sostenible en 2025 (niveles biológicos seguros) sin la necesidad de “cierre de empresas, amarre de barcos y la destrucción de empleos”.

Los recortes pueden perjudicar a 587 barcos y 3.600 puestos de trabajo directos, según el sector, que también ha alegado la “discriminación frente al resto de pescadores afectados por el plan comunitario.

Eso significa, apunta el sector, que un barco español parte desde el primero de enero con 55 días menos de pesca que uno de otro país.

Los pescadores han pedido reuniones con los organismos científicos y “acciones piloto para determinar qué medidas son adecuadas”.

“El ministro Planas sólo se hace responsable a la actividad pesquera, sin considerar las amenazas de la contaminación, la presión demográfica costera, el cambio climático, la falta de depuración de las aguas o la presencia progresiva de especies invasoras”, según el comunicado.